Fernanda 1844

Fernanda es una obra de Alejandro Dumas cuyo titulo original es Fernande se atribuye que fue escrita con la colaboración de St. Hippolyte Auger. De acuerdo a la “Bibliografia de Alejandro Dumas” de Frank Reed fue publicada como una serie en la “Revue de Paris” durante 1843. Su edición original fue en París, por Dumont, 3 volúmenes, 1844. La obra en español conserva el mismo titulo y fue publicada por la editorial de Luís Tasso. Barcelona, 1888.

Fernanda Argumento

La señora de Barthele recibe a su amigo y antiguo amante el Conde de Montgiroux en su casa de Fontenay-aux-Roses para contarle los pormenores de su hijo Mauricio de Barthele, un joven noble que para sorpresa de su madre y esposa Clotilde (sobrina del barón), se encuentra en un estado lamentable de salud, negándose a comer y quedándose en la cama postrado. La señora Barthele le cuenta al señor Montgiroux que ambas han descubierto que el motivo es haber perdido el amor de una mujer autoproclamada cortesana. 

Por sugerencia de su médico han logrado que los amigos de Mauricio, León de Vaux y Fabián de

Rieulle para que con engaños traigan a la cortesana, ya que tienen la esperanza que la presencia de ésta logre el milagro de salvarla, independientemente que el pensar en recibirla sea una afrenta al honor de la familia al introducir a una persona de este tipo. La Señora de Barthele ruega a su amigo que la acompañe durante la visita, algo que el señor de Montgiroux acepta con disgusto ya que su objetivo es encontrarse con su actual querida.

Fabian de Rieulle se adelanta, porque tiene como plan aprovechar que Clotilde, este vulnerable al descubrir la infidelidad de su esposo, a fin de seducirla. De pronto llega Fernanda la cortasana nombrola como la señora Ducoudray, al no conocer su apellido. Fernanda al descubrir el engaño queda muy molesta e incomoda, pero tanto la señora  de Barthele como Clotilde la reciben y le ruegan que se quede, porque de acuerdo al doctor es la única que puede salvar a Mauricio. Para sorpresa del conde reconoce a Fernanda como su querida, pero ambos guardan silencio para no ser descubiertos. 

Fernanda sintiéndose cada vez más incomoda acepta ver a Mauricio en su dormitorio y descubre que efectivamente se encuentra en mal estado. Mauricio con solo escuchar la voz de Fernanda reacciona y comienza a mostrar interés en lo que ocurre a su alrededor. La señora de Barthele tiene como plan que la señora Ducoudray pase el fin de semana en su casa, mientras tanto Clotilde reflexiona que su esposo nunca la quiso más allá de como una amiga, por ello, las palabras de amor que le dirige Fabian, no le son indiferentes. De pronto llega una visita inesperada la prima de la señora de Barthele quien conoce a Fernanda desde su niñez y hará de conocimiento de todos el origen noble de la conocida cortesana.