Aventuras de un Artista 1854

Aventuras de un Artista (titulo original Une Vie d’artiste) es una novela sobre la vida del actor de teatro Etienne Melingue antes de alcanzar el estrellato. Este actor posteriormente sería famoso por dar vida en las tablas a muchos personajes de Dumas como D'Artagnan, Buridan, Montecristo, Urbano Grandier. entre otros. La obra fue publicada en el diario “Le Mousquetaire” de Diciembre,1853 a Marzo, 1854. Como libro fue editada por primera vez por Cadot en 1854 en dos volúmenes. La edición en español se titulo "Del Sufrimiento a la Gloria o Aventuras de un Artista", en Madrid, España, por la Imprenta de Don Bernabe Fernandez en 1861. Esta edición tiene la particularidad de ir más allá de la obra de Dumas, agregando un apéndice para contar lo que fue de la vida de Melingue luego de tener su primera gran oportunidad en París. 

Aventuras de un Artista Argumento

Gustavo se presenta en la casa de Alejandro Dumas con una carta de recomendación de la amiga del escritor la señora Dorval. En la carta le recomienda a este joven actor que solo se ha hecho conocido en provincia y aún no ha tenido la oportunidad de debutar en París. Dumas le promete ayudarlo y mientras tanto, Gustavo le cuenta su vida hasta ese momento.

Su verdadero nombre es Etienne, hijo de un ex soldado de Napoleon convertido en aduanero. A temprana edad pierde a su Madre y pocos años más tarde a su hermano menor por una fiebre. Mientras va creciendo le llaman la atención los saltimbanquis y acostumbre a escaparse de sus clases de arte y de escultura, solo para aprender a ser uno. Todo esto lo mantiene en secreto de su padre por temor a que no quiera aceptar su vocación.

Cuando alcanza la mayoría de edad convence a su padre para viajar a París, prometiendole que se dedicará a la escultura. Pero su interés por el teatro es más grande y se une a un grupo que viaja a provincia. Conoce a Hipolito que será su gran amigo y con quien padece  la falta de pago, hambre y problemas de estar en un grupo de teatro que no tiene renombre. Etienne decide tomar como nombre artístico el de Gustavo.

Entra a varios grupos de teatro pero todos son un fracaso y es más lo que pierde que lo que gana. Decide regresar a su hogar, y hace un viaje a pie que casi lo deja sin sentido llega a su casa desfalleciente, siendo atendido por su padre que permanece a su lado mientras se recupera. 

Gustavo le confiesa a su padre que ha estado dedicándose al teatro y promete no volver a él, pero cuando se siente mejor regresa a París donde se une nuevamente a otra compañía teatral que representa en provincia, le pagan poco, pero al menos gana algo en comparación con sus anteriores experiencias. Un productor de teatro lo convence para actuar en América con un sueldo mucho más alto del que tiene en la actualidad. Luego de un viaje lleno de grandes dificultades llega a Guadalupe,  y también actuará en Martinica y Trinidad.

Luego de un tiempo una gran tempestad afecta la zona, quedando la Martinica desolada, los actores deciden presentar sus obras para animar a la gente, mientras se va reconstruyendo todo. Llega la revolución de 1848 en Francia, quedando el Duque de Orleans como gobernante, quien esta a favor de la constitución, se conceden derechos a los esclavos negros, el poder asistir a los teatros. Pero los gobernantes de la Martinica no quieren reconocerlos y en lugar de prohibirles asistir, deciden prohibir toda representación teatral. 

Gustavo se queda sin trabajo, pero gracias a su ingenio y habilidad para pintar se dedica a hacer retratos, ganando una gran reputación y al fin dinero suficiente para estar tranquilo. Pero al mismo tiempo extraña su vida de actor, hasta que un día un nuevo productor se le presenta y le recomienda regresar a Francia para actuar en provincia. Decide volver intentar una vez más alcanzar la fama.